Las varices son no sólo un problema estético, sino también médico. Presentan diferentes grados de gravedad. El tratamiento de las varices suele ser complejo, combinando varios tratamientos a la vez: medidas posturales, ejercicio físico, medias de compresión, cirugía, escleroterapia y láser vascular.
Es muy importante descartar otras patologías asociadas a las varices antes de tratarlas; asimismo, en algunos casos, se hace un estudio previo con ecografía doppler para descartar que esté afectado el sistema venoso profundo. Después de ser estudiados, los casos que lo requieran se derivan al cirujano vascular. Los casos iniciales y de pequeño vaso pueden ser susceptibles de tratamiento con tecnología láser, sola o asociada a escleroterapia.
Debe informar a su médico si toma alguna medicación, si fuma o si es alérgico a algún medicamento. Su médico le proporcionará instrucciones específicas acerca de cómo prepararse para la intervención, y que incluirá normas sobre qué alimentos y líquidos tomará, el tabaco, la toma o supresión de medicamentos y vitaminas y el lavado de la cara. Antes del tratamiento, evitará la exposición solar de las zonas a tratar (mínimo de cuatro semanas) y la toma de fármacos fotosensibles.
La mayor parte de las veces es un tratamiento que no precisa anestesia.
Un médico analizará qué equipo de láser es más aconsejable en cada caso, ya que dependiendo del calibre del vaso, la profundidad de éste, la localización y el tipo de piel, utilizamos una técnica u otra. El láser destruye los glóbulos rojos coagulando el vaso e iniciando el proceso de eliminación del mismo. Las sesiones estarán dirigidas por un médico.
Es un proceso ambulatorio que no requiere hospitalización.
Se realiza un tratamiento tópico con una crema antiinflamatoria y antiséptica durante las primeras 48 horas. A continuación, el dermatólogo decidirá qué tratamiento es el más conveniente. Después del tratamiento es necesario aplicar una fotoprotección solar alta.
Son necesarios varios tratamientos (entre 3 y 6) para la eliminación completa de las varices, no pudiéndose predecir el número de sesiones necesarias para su eliminación completa. El tiempo necesario entre una sesión y la siguiente varía entre 6 y 8 semanas. Es un método que no precisa la interrupción del trabajo diario y no presenta un postoperatorio complejo.
La información de esta sección no sustituye la consulta a un especialista. Los resultados obtenidos dependen de cada paciente y deben ajustarse a la realidad. La utilización de esta tecnología es compleja y precisa un entrenamiento adecuado.
La información de esta sección no sustituye la consulta a un especialista.